martes, 30 de octubre de 2012

Merecerá la pena.

Absolutamente todo merece la pena si te hace sonreír, por lo tanto, tú la mereces. Algo que puede parecerte imposible puede cumplirse en milésimas de segundo, cuando menos lo esperas. Vivimos de sueños que si los seguimos podemos conseguirlos, queda demostrado. No todo es posible, cierto, pero quién no arriesga no gana. Y yo he arriesgado, he arriesgado a conocerte, a que me conozcas. Es más, estoy arriesgando lo poco que queda de mí, en ti. Por que creo conveniente darlo todo por una sonrisa tuya. Tengo la necesidad de hacerte feliz, y como solemos decir, "Roma no se construyó en un día", esto tampoco, poco a poco. Me has devuelto la ilusión, y confío en que esta vez puede salirme bien algo... confío en ello porque al otro lado estás tú, y la cosa cambia. Me encanta esto, me encantan nuestras decisiones, nuestras acciones, nuestras charlas, nuestras tonterías, nuestras risas, sonrisas, nuestros besos... nosotros. Voy a seguir al pie del cañón de esto ¿vale? por el simple hecho de que en ti he visto toda la ilusión que había perdido, y quiero que a ti te suceda lo mismo.

Quizás no sea fácil, pero merecerá la pena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario